Abstract
Impulsados por un sostenido proceso democratizador iniciado a fines de la década del setenta, los países de América Latina viven hoy numerosas transformaciones políticas y sociales. Se destacan entre ellas las fuertes crisis, cuyas manifestaciones más relevantes son la inestabilidad institucional, el descontento ciudadano y la erosión de los sistemas de partidos tradicionales. En este contexto, se produce un creciente uso de mecanismos de democracia directa (mdd). La ponencia busca analizar en qué medida y en qué circunstancias las consultas populares, la iniciativa ciudadana y la revocatoria de manato contribuyen a: 1) consolidar la democracia representativa, con efectos de estabilidad sobre el sistema político; 2) fortalecer la "democracia delegativa", esto es, el protagonismo del Poder Ejecutivo, basado en el apoyo popular y contra los otros poderes del estado; 3) incrementar la calidad de la democracia introduciendo mecanismos de control y de participación en la toma de decisiones por parte del ciudadano. Para el análisis, se propone el estudio comparado de Argentina, Ecuador y Perú, considerando tanto el gobierno nacional como los provinciales o seccionales y los municipales o cantonales.