Abstract
A inicios del siglo XX, los conceptos del “anarquismo histórico” propuestos por W. Godwin, P.-J. Proudhon, M. Bakunin, y P. Kropotkin son reemplazados por una variedad de proyectos utópicos del anarquismo post-clásico. Entre esta heterogeneidad y diversidad el más inusual fue el movimiento de los anarquistas-biocosmistas, integrado por A. Sviátogor, A. Yaloslávski, P. Ivanitski, I. Yakovlev, G. Butorin, entre otros. Ellos postularon, por una parte, la idea de la liberación de lo estatal no solo en la tierra, sino también en otros planetas, la idea de la conquista del cosmos, del establecimiento de comunicaciones interplanetarias (“interplanetarismo”), y por otra, profesaron la superación del “localismo” de la vida, la ampliación del “principio de la identidad” previo al reconocimiento y realización de la inmortalidad individual (“inmortalismo”). Al negar la filosofía del cosmismo de Fiódorov (denomidada por Sviátogor como “doctrina de los padres”), basada principalmente en la idea de la “resurrección”, los biocosmistas propusieron resolver el problema de la inmortalidad biológia a partir de metamorfosis y desviaciones corporales, como por ejemplo el “bestialismo” y la anabiosis. La concepción de tales desviaciones corporales estaban dirigidas, desde el punto de vista del biocosmismo, a la preservación de la vida y la adquisición de una inmortalidad biológica antes que simbólica, que le otorgue al hombre la libertad máxima y los más altos derechos individuales. Lo anterior fue desarrollado tanto en manifiestos, como en poemas y en obras de ciencia ficción, publicados parcialmente en 1918 en el periódico Anarjia, en las colecciones de Bioscosmism entre 1921 y 1922, en la revista moscovita Biocosmist, la revista Bessmertie de Petrogrado en 1922, entre otras. Así, este artículo se enfoca en la representación de las desviaciones corporales (“bestialismo”, “anabiosis”, y otras formas de una nueva norma corporal) como un “modus de inmortalidad” e “infinitud biológica”, entrelazadas con el rechazo a la localización fija del hombre en el espacio y el tiempo, y con la idea del establecimiento de una época de nomadismo en la “comunidad biocósmica” en el marco de las práctcas artísticas y filosóficas de los anarquistas- biocosmistas.